DÍDAC JOSEP ALFEREZ 'Estoy en una situación precaria pero ahora estoy encerradísimo, a la que entras después de entrar tan joven en el mundo laboral, estoy que no puedo salir de esa situación. El último trabajo que tuve yo tenía un contrato de 20 horas semanales y estaba haciendo una media de 50. Estaba cobrando de 1.050 a 1.100 euros, esto sin contar que he estado cotizando media jornada, si ahora genero una nueva situación de paro pues en vez de tener 900 euros de paro volveré a tener 600. Con la tontería de que somos demasiados buscando empleo el empresario te dice: 'no, no, vamos a hacer una cosa, me voy a ahorrar tu paro, vas a cotizar la mitad y tu sueldo también me lo voy a ahorrar'. Lo primero que he tenido que hacer este último año ha sido mudarme de Barcelona. Estaba pagando en Barcelona trescientos y pico euros por un piso compartido en un pueblo a 15 minutos en coche y a una hora en autobús estaba pagando lo mismo por un piso solo. Comer pasta y arroz porque es lo más barato, esto es un poco lo que es una persona en el umbral de la pobreza. No entras pero estas ahí con un pie dentro y un pie fuera. Llegas a los 30 y ya tienes un proyecto de vida madura y de más. Ya he pasado los 30 y estoy aquí encerradísimo en una situación en la que no sé como salir, un proyecto de vida totalmente adolescente, que hago lo posible por cambiar pero es que no, hace tres años empecé una carrera universitaria pero la tengo congeladísima, obviamente. Como no soy estudiante que trabaja, soy trabajador que estudia tenía que hacerlo a distancia porque no puedo estudiar, tengo que estudiar y trabajar, eso te limita mucho las opciones. Así que lo hice a través de una universidad a distancia pero las tasas crecieron muyn rápido y a día de hoy me estan pidiendo por un curso lectivo entero más de 2.000 euros. La idea sería coger asignaturas sueltas porque sino es imposible, pero es que ahora mismo no puede permitirme ni una asignatura. Si las cosa no se anima yo me tendré que marchar, sí o sí, es que no queda otra."
És el cas del Dídac, un jove de 31 anys, que no aconsegueix sortir de l’espiral dels treballs temporals. Treballa des dels 16 i no ha tingut mai cap feina fixa i tampoc no ha pogut acabar els estudis perquè econòmicament no s’ho ha pogut ni s’ho pot permetre. Fa poc va decidir deixar l’habitació que tenia en un pis compartit al barri del Raval i ha marxat a viure fora de Barcelona perquè, diu, continuar a la ciutat no era viable. El seu futur, ara mateix, el veu lluny de Catalunya.
